A menudo, cuando pensamos en el compromiso de los empleados, nos vienen a la mente imágenes de modernas oficinas con futbolines, salas de relax, y fruta fresca todas las mañanas. Sin embargo, un ambiente de trabajo saludable y productivo requiere de algo más que ventajas superficiales.
Según una investigación global, apenas un tercio de los trabajadores se sienten verdaderamente comprometidos en sus puestos. Este dato nos lanza una clara llamada de atención, instándonos a revisar y repensar nuestras estrategias para fomentar un mayor compromiso.
¿Cuál es el impacto del compromiso en las organizaciones?
¿Por qué este dato es importante? Porque las empresas con empleados no comprometidos sufren una disminución en la productividad, un descenso en los niveles de creatividad e innovación y una rotación de personal más alta.
Además, subestimar las repercusiones de un bajo compromiso es realmente caro para las organizaciones: reemplazar a un solo empleado puede llegar a costar varios miles de euros, que pueden incrementarse si sumamos los costes de productividad y tiempo que requiere entrenar a las nuevas incorporaciones.
Por otro lado, es bien sabido que los empleados comprometidos demuestran un mayor entusiasmo e implicación en su trabajo. Un estudio de Gallup reveló que las empresas con altos niveles de compromiso experimentan una disminución del absentismo en un 81% y una reducción del 18% en las tasas de rotación. También, aumentan su productividad en un 18% y su rentabilidad en un 23%.
Así que sí, el compromiso de los empleados no es una ventaja extra, sino una necesidad.
Ante esta situación, solo nos queda hacernos una pregunta: ¿cómo podemos fomentar una auténtica motivación y conexión en nuestro equipo?
A continuación, te dejamos con unos consejos para que, al aplicarlos, puedas hacer crecer tu negocio.
7 consejos que te ayudarán a mantener el compromiso de los tuyos a largo plazo
Reconoce el trabajo bien hecho
El reconocimiento del trabajo bien hecho es una de las herramientas más eficaces para fomentar el compromiso y la motivación de los empleados. Con ello, no solo estás valorando el esfuerzo y los logros de tus empleados, sino que también estás enviando un claro mensaje de apreciación y respeto por su contribución a la empresa.
Este reconocimiento puede ser expresado de múltiples formas. Puedes optar por recompensas tangibles, como bonificaciones, días libres adicionales o regalos, que son especialmente motivadores para fomentar el rendimiento y la dedicación.
Sin embargo, a veces un simple elogio o un agradecimiento sincero pueden tener un impacto igual de significativo, o incluso mayor. Ten en cuenta que, ya sea de forma pública o privada, es crucial personalizar este reconocimiento, mencionando los logros específicos y el impacto que el trabajo del empleado ha tenido en la empresa.
Cuida el Onboarding
Un onboarding efectivo es esencial para crear una primera impresión positiva y duradera. Un proceso de incorporación bien estructurado no solo ayuda a los nuevos empleados a sentirse bienvenidos, sino que también les permite entender rápidamente su rol y cómo encaja en la visión general de la organización.
Las presentaciones de equipo, por ejemplo, pueden proporcionar un contexto valioso y establecer relaciones iniciales. También es vital la formación en herramientas y procesos de la empresa para que puedan comenzar a contribuir rápidamente.
Más allá de eso, es fundamental proporcionar seguimiento a lo largo de las primeras semanas y meses, asegurándote de que los nuevos empleados se están adaptando y se sienten apoyados en su nuevo entorno.
Implementa un plan de carrera bien definido
La fidelización de los empleados no se trata solo de mantenerlos satisfechos en su trabajo actual, sino también de ofrecerles una visión clara de cómo van a crecer y progresar dentro de la empresa.
Al proporcionar un plan de carrera bien definido y bien implementado, les das a tus empleados la seguridad de que tienen un futuro en tu organización. Este plan debe ser personalizado para cada empleado, teniendo en cuenta sus habilidades, intereses y metas profesionales y promoviendo un sentido compartido de propósito y dirección.
Planea acciones de team-building
Las actividades de team-building son más que una oportunidad para el ocio y la diversión. Son una herramienta eficaz para fomentar la cohesión del equipo, promover el respeto mutuo y mejorar la colaboración.
Existen una gran variedad de Team-Buildings para llevar a cabo. Por ejemplo, los talleres son útiles para desarrollar habilidades de trabajo en equipo, mientras que las salidas de equipo y las comidas juntas proporcionan un entorno más informal para fortalecer las relaciones personales y cultivar la empatía.
Realiza reuniones 1:1
Las reuniones cara a cara son una excelente oportunidad para el feedback bidireccional y la resolución de problemas. Estos encuentros individuales proporcionan un espacio seguro y privado para que los empleados compartan sus inquietudes, ideas y metas profesionales con su responsable directo.
Como líder, te permiten entender mejor a los tuyos, su satisfacción laboral y sus expectativas y también te ofrecen una plataforma para elogiar los logros, discutir áreas de mejora y planificar el desarrollo de la carrera del empleado.
Promueve iniciativas que impulsen el bienestar
Siempre es buena idea invertir en la felicidad y la salud de tus empleados. Ya sea a través de talleres de mindfulness para promover la salud mental, descuentos en gimnasios para fomentar la salud física, u horarios de trabajo flexibles y políticas de trabajo desde casa para equilibrar la vida laboral y personal, promover el bienestar condice a un aumento de la satisfacción y el compromiso de los empleados, reduciendo el agotamiento y mejorando la productividad.
Fomentar la comunicación abierta
Crear un ambiente de seguridad psicológica, en el que los empleados se sientan cómodos para expresar sus opiniones, compartir ideas y dar feedback, tiene un impacto enorme en el compromiso del equipo.
Puedes lograrlo mediante reuniones de equipo regulares, donde todos tengan la oportunidad de hablar, canales de comunicación abiertos que fomenten la discusión continua, y una cultura de transparencia y confianza, en la que los empleados se sientan seguros de que sus opiniones son valoradas y tomadas en cuenta.